DIGNIDAD SALARIAL Y PROFESIONAL

El punto de partida no era fácil. Tras la unión de guardias civiles y policías nacionales para reivindicar vehementemente la tantas veces prometida y nunca ejecutada, equiparación salarial entre los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y sus homólogos en cuerpos policiales autonómicos, en el año 2018 por fin se dieron todos los condicionantes necesarios para que se creara la “tormenta perfecta” y se consiguiera la esperada llamada: el Ministerio del Interior convocaba a los legítimos representantes de los guardias civiles y policías para sentarse en una mesa de negociación que culminara con la firma de un acuerdo por la equiparación salarial.

Y decimos que el punto de partida no era nada fácil porque no estaba permitido este tipo de procesos para alcanzar acuerdos en el cuerpo de la Guardia Civil. Sin embargo, los hechos y el paso del tiempo han demostrado que hemos estado a la altura de las circunstancias y que de este proceso de negociación se han visto beneficiados, tanto la propia institución, como los hombres y mujeres que prestan servicio en ella.

Doblegando fuertes resistencias de un generalato que no quería que ejerciéramos este derecho, y venciendo posiciones irresponsablemente ancladas en el tan deletéreo populismo, conseguimos tras un proceso de negociación, la firma de un acuerdo que, a pesar de todos los contratiempos, ciclos económicos y hasta una pandemia de escala mundial, se ha cumplido en el presupuesto económico recogido en el mismo, a expensas de una revisión de las cantidades ya ejecutadas.

Pero aquí no acaba este proceso de equiparación salarial. Tan solo hemos llegado al primero de numerosos avances que nos esperan. Quedan cláusulas del acuerdo pendientes de ejecución, como:

  1. La tramitación de una ley para que en el futuro no se produzcan desigualdades salariales como la que padecíamos.
  2. El desarrollo de procesos para la incorporación al servicio de nuestros compañeros en situación de reserva sin destino.
  3. La revisión de las cantidades destinadas al proceso de equiparación salarial.

Y todo ello con el objetivo de alcanzar la equiparación salarial y profesional total y absoluta para los miembros de la Guardia Civil.

Desde la Asociación Unificada de Guardias Civiles, estamos plenamente convencidos de que lograremos nuestros objetivos. Para ello, es de vital importancia mantenernos fuertes y unidos, fieles a los avances conseguidos hasta la fecha, que son consecuencia de años de lucha, incluso de persecuciones a los representantes de este ilusionante proyecto que se agrupa bajo las siglas AUGC, para alcanzar un futuro con derechos, y nuestra dignidad salarial y profesional.

Y precisamente, esa será otra de las líneas estratégicas que AUGC llevará a cabo para los próximos cuatro años: la equiparación profesional porque aún cobrando lo mismo que cualquier policía autonómico o local, seguiríamos discriminados si realizamos más horas de servicio y tenemos menos derechos sociolaborales.

No solamente de entre todos los cuerpos policiales, sino de todos los servicios de emergencias, son los guardias civiles quienes aún padecen las peores condiciones laborales y profesionales.

Un sistema de productividad discriminatorio con quienes realizan servicios operativos, una jornada laboral sin turnos rotatorios, conciliación laboral y familiar, estado de las dependencias de la Guardia Civil, el material policial y los vehículos para prestar servicio son cuestiones que desarrollamos en este programa electoral, compromiso de AUGC para los próximos cuatro años.

Otro ejemplo, lo encontramos en la carrera profesional, donde a pesar de que la Ley de Personal así lo recoge, en virtud de lo dispuesto en el Art. 14 de la Ley 29/2014 de Régimen de Personal del Cuerpo de la Guardia Civil, aún no se han llevado a cabo concursos para posibilitar el ascenso por cambio de escala, siendo una postura de la Dirección General de la Guardia Civil contraria al artículo 27 sobre la carrera profesional, del Título V de la Ley Orgánica 11/2007, reguladora de los Derechos y Deberes de los miembros de la Guardia Civil. AUGC ya ha iniciado el trámite judicial para que del total de plazas reservadas a la promoción profesional para el acceso a la escala de oficiales, hasta un 30 por cien (así lo marca la ley) se convoquen en la modalidad de cambio de escala para los suboficiales, cabos y guardias civiles que cumplan los requisitos.

También existen cuestiones que pueden pasar desapercibidas para algunos, pero no para AUGC. Nos referimos a que en la Guardia Civil se deben desarrollar procesos de transformación, mediante la actualización de los planes de formación, para mejorar el clima laboral en las unidades. Mejorar la asertividad, el entendimiento, en definitiva que la imposición dé paso a la convicción, como manera de entender unas buenas relaciones laborales en el seno de las unidades, recibiendo un trato profesional.

La dignidad en el ejercicio de nuestra profesión está reflejada claramente en alcanzar unas condiciones profesionales, sociales y económicas justas, homologables a las del resto de cuerpos policiales, basadas en el en el derecho a la igualdad y no discriminación, proyectada en el ordenamiento laboral, para que se vea reflejada en el reconocimiento directo y la garantía de los derechos de los guardias civiles. Y no sólo ya en los específicamente laborales, sino también los propios como ciudadanos, de pleno derecho, con las meras limitaciones estrictas en el ejercicio de nuestras funciones.

Con tu voto, estarás decidiendo tu futuro. 

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